¿Menos es más? Todo lo contrario.

La sostenibilidad no es sólo una tendencia destacada de nuestro tiempo, sino sobre todo una toma de conciencia sobre el uso responsable de los recursos de que disponemos.

 

Por ello, las empresas en particular tienen la responsabilidad de adoptar las medidas adecuadas en el mayor número posible de ámbitos y a todos los niveles imaginables para que la sostenibilidad se convierta en parte integrante de su propia cultura corporativa.

 

Más eficiencia energética y energías renovables

 

Hace varios años dimos pasos decisivos en esta dirección con la construcción de nuestra nueva sede empresarial. El edificio, energéticamente eficiente, cuenta con un sistema fotovoltaico con el que cubrimos gran parte de nuestras necesidades de electricidad. Además, sólo utilizamos electricidad procedente de fuentes de energía renovables para nuestras necesidades adicionales. También hemos instalado estaciones de carga para vehículos alimentados con electricidad verde en los aparcamientos próximos al edificio.

 

 

Más hábitat para las abejas y compañía

 

En lo que respecta a los espacios verdes y los taludes que rodean el edificio, no nos centramos en el simple mantenimiento, sino en una utilización más sensata desde el punto de vista ecológico. Por eso, entre otras cosas, se están creando praderas de flores silvestres, donde también se construirán hoteles para insectos. Aquí podemos contar con el compromiso de nuestros empleados, pues están tan entusiasmados con esta idea que un equipo está dedicando su tiempo libre a esta tarea.

 

 

Más materiales reciclables y digitalización

 

También hemos detectado un gran potencial de mayor sostenibilidad dentro de la propia empresa.

 

Desde hace algún tiempo, sólo utilizamos papel comercial y sobres de papel reciclado. Para otros productos impresos, como folletos y octavillas, cambiaremos gradualmente a papel respetuoso con el medio ambiente. Lo mismo cabe decir de nuestros envases: en el futuro, por ejemplo, sólo utilizaremos bolsas tubulares fabricadas con materiales reciclables.

 

En este contexto, también suprimiremos el "probado" sistema de archivo en papel, sustituiremos el número de impresoras de la empresa por sistemas de impresión centralizados y nos centraremos aún más en la digitalización, que también ofrece potencial en términos de reducción de CO2.

 

 

Más ahorro de CO2

 

Por ejemplo, el trabajo desde casa, que ha demostrado su eficacia durante la pandemia, puede seguir siendo una opción para que nuestros empleados eviten largos desplazamientos en coche hasta la empresa. También utilizamos cada vez más nuestra moderna infraestructura informática para celebrar reuniones en línea, lo que también nos permite reducir significativamente los largos desplazamientos a las reuniones. Pero estamos pensando un poco más allá e incorporando proveedores de servicios regionales para acortar las rutas de reparto y reducir así las emisiones.

 

En definitiva, creemos que estos pasos nos sitúan en el camino correcto, que seguiremos persiguiendo con constancia, porque para nosotros, más es menos.

Comparar