Duelos emocionantes, espíritu de equipo y capacidad de liderazgo
Este año, un total de 14 jefes de departamento se reunieron en el Hotel Platte de Attendorn del 26 al 29 de septiembre.
Tras llegar y ser recibidos en el hotel, el primer día se viajó en vagón cubierto hasta el lugar de reunión, el Ü-NN-Hall de Attendorn. Forma parte de un complejo de pabellones situado en un terreno industrial de 20.000 metros cuadrados que no se utiliza desde hace décadas. Los antiguos vestuarios y comedores sirven ahora de espacioso recinto con un aire industrial muy especial, ya que las antiguas taquillas de los trabajadores se utilizan para variar con flexibilidad el tamaño de la sala, de 800 metros cuadrados en total.
La agencia de eventos Bash-Boom-Bang se encargó de preparar el acto inaugural, invirtiendo mucho tiempo y creatividad para que este tipo de eventos se conviertan en experiencias inolvidables para los participantes.
Una vez más, el concepto fue todo un éxito, ya que los jefes de departamento no sólo tuvieron que mostrar su espíritu de equipo en emocionantes duelos individuales y en grupo, sino también demostrar su rapidez, conocimientos y habilidad en una gran variedad de juegos.
Recién motivados por la jornada anterior, los participantes aprendieron al día siguiente muchas cosas interesantes sobre el "desarrollo de equipos" en un taller impartido por Michael Ullrich. Este entrenador por convicción sabe muy bien, gracias a sus más de 20 años de experiencia en liderazgo, que las tareas de los directivos en un mundo laboral en constante cambio son cada vez más diversas y exigentes.
En este contexto, el taller no sólo abordó cuestiones importantes (por ejemplo ¿Cómo se genera confianza en un equipo? ¿Qué valores son importantes y valiosos para un equipo? ¿Qué expectativas tienen mis empleados y qué expectativas tengo yo?), sino que también proporcionó algunas ideas fundamentales que son útiles para el trabajo diario, por ejemplo Lo que está claro para mí no tiene por qué estarlo para mi homólogo. O: Lo que yo pienso, mi homólogo no lo oye.
El taller terminó por la tarde, sin duda con muchas ideas nuevas y valiosos consejos, de modo que todos los participantes tuvieron aún tiempo suficiente para el bienestar, una breve excursión y debates conjuntos.
Al final de los tres días, todos los participantes se reunieron en una sesión de trabajo conjunta para tratar temas internos de la empresa.
